LITTLE ROCK - Hace dos semanas, todos nos alarmamos al enterarnos de la existencia de una importante grieta en una viga que sostiene el puente Hernando DeSoto de la I-40, que conecta Arkansas y Tennessee.
Los inspectores no encontraron ningún otro problema, y ahora que la reparación ha comenzado, podemos respirar más tranquilos. Estoy agradecido de que los inspectores hayan encontrado esa grieta y hayan evitado una catástrofe.
También estoy agradecido de que los arkansanos aprobaron el año pasado el tema 1 para mantener el impuesto de ventas de medio centavo para la construcción y mantenimiento de carreteras. Esa inversión proporciona fondos estatales continuos para la inspección y reparación de nuestras carreteras, caminos y puentes.
Últimamente hemos oído hablar mucho de las infraestructuras. El Congreso está negociando un paquete de infraestructuras con el presidente Biden. Algunas de las discusiones se centran en qué es exactamente lo que se considera infraestructura.
En mi opinión, las infraestructuras incluyen las autopistas, las carreteras, los aeropuertos, los puertos marítimos, las redes eléctricas, el suministro de agua, los sistemas de comunicación y, ahora, el sistema de banda ancha. Las infraestructuras requieren asociaciones entre el sector privado y el gobierno, y la cooperación entre el gobierno estatal y el gobierno federal.
Hoy, nuestra atención se centra en nuestras infraestructuras de transporte y en el puente que cruza el río Misisipi entre West Memphis y Memphis. El puente se inauguró en 1973, y el Departamento de Transporte de Arkansas lo ha adaptado a los terremotos. Unos 41.000 vehículos cruzan el puente cada día. Desde que descubrimos la viga agrietada, hemos cerrado el puente y desviado el tráfico al puente de la I-55, inaugurado en 1949. Los inspectores de puentes de Arkansas y Tennessee inspeccionaron el puente después de que cerráramos el de DeSoto y comprobaron que el de la I-55 era seguro.
La empresa que está reparando el puente ha atornillado placas de acero a cada lado de la viga agrietada. La empresa ha colgado las plataformas que soportarán los equipos de reparación.
No sabemos cuánto tiempo permanecerá cerrado el puente, pero el comisionado del Departamento de Transporte de Tennessee dijo el jueves que las reparaciones podrían no estar terminadas hasta agosto. El cierre ha provocado retrasos que están costando al sector del transporte por carretera 2,4 millones de dólares al día. Este es sólo uno de los costes que supone el cierre de una parte de la infraestructura que conecta nuestra nación.
Este casi desastre ilustra lo interdependientes que somos. También ilustra la urgencia de que los estados sean proactivos en el mantenimiento de las infraestructuras. Es por eso que la cuestión 1 era tan importante. Nuestra inversión en carreteras proporciona a Arkansas los recursos para inspeccionar las carreteras y los puentes y mantenerlos en buen estado, y para responder rápidamente a las emergencias.
Todo el mundo sabe que necesitamos buenas carreteras para nuestra vida diaria. También sabemos que mantener carreteras seguras es caro. Estoy agradecido de que los votantes de Arkansas estuvieran dispuestos a aprobar el dinero que nos permitirá mantener nuestras carreteras y puentes seguros.